El Colegio Suizo de Santiago fue fundado en 1939. Gracias a su nivel académico, su atmósfera familiar y su carácter multicultural, goza de gran prestigio en Chile y, con ello, también es un fiel representante de Suiza y los valores que definen la Swissness.
En una época en la que los problemas políticos europeos también alcanzaban a Chile, familias suizas tradicionales en Santiago (como los Dünner, Isliker, Bittig, Flueler, Hegetschweiler o los Küpfer) quisieron fundar un Colegio propio de habla alemana, al que no afectaran esos desórdenes. Luego, se construyó un chalet en el terreno del Club Suizo y más adelante, se compró una casa que se convirtió en una escuela primaria que albergó a casi 50 alumnos.
Pese a los escasos recursos, el alumnado creció en pocos años a más de cien, distribuidos en Kindergarten y seis cursos de educación básica. De la gran cohesión que existió en la Colonia Suiza durante los años de guerra, surgió la construcción de un nuevo club, una piscina y el refugio en Lagunillas.
Gracias a la iniciativa del Presidente del Colegio, Richard Keller, y del Director del Colegio, Robert Hans, en 1953 se formó el departamento de Educación Media (que se ha ampliado año a año) y, en la misma época, comenzó también la tradición de la semana de trabajo al aire libre, en contacto directo con la naturaleza y la vida sencilla.